Durante casi 1500 días, el récord a la publicación de Instagram con más likes perteneció a la cuenta @world_record_egg.

Esta cuenta fue creada con el propósito específico de superar la publicación de Kylie Jenner con más likes en ese momento: una foto de su recién nacida.

La publicación de @world_record_egg era una simple foto de un huevo en un fondo blanco. El pasado 20 de diciembre, sin embargo, otra cuenta reclamó la corona.

El día 18 de ese mes, Lionel Messi publicó un carrusel de fotografías de él levantando el trofeo de la Copa del Mundo de la FIFA y celebrando con sus compañeros. Dos días después, se volvió la publicación con más likes de la plataforma, con un total de +74M de likes hasta el momento.

De hecho, la lista de las 5 publicaciones con más likes se ve así:

Posición	Publicación	Likes
1	Lionel Messi después de ganar la Copa del Mundo de la FIFA 2022	74.4M
2	Foto de un huevo	58.8M
3	Lionel Messi durmiendo con el trofeo de la Copa del Mundo	54.2M
4	Cristiano Ronaldo y Lionel Messi jugando ajedrez	42.6M
5	Lionel Messi en un avión con el trofeo de la Copa del Mundo	41.7M

De las siguientes 5 publicaciones con más likes (6-10) una es la última publicación antes de morir del rapero XXXTentacion y las 4 restantes pertenecen a Cristiano Ronaldo y Messi.

Aquí hay un patrón interesante. Ocho de las 10 publicaciones con más likes son de Cristiano y Messi.

¿Qué significa esto y qué podemos aprender?

¿Los creadores de contenido son los nuevos atletas? – Caso de estudio del box

En el 2020, Logan Paul y KSI, dos youtubers sin experiencia en boxeo, protagonizaron una pelea que atrajo a una audiencia de +1M de personas. La mayoría de los profesionales no atraen a esta cantidad de personas.

¿Por qué las personas prefieren ver a estas personas que a boxeadores profesionales?

Veamos el caso de estudio del box, de acuerdo a lo presentado por Athletic Interest en YouTube.

La época dorada del box fue en los años 60’s. Esta época coincide con el inicio de la carrera de Muhammad Ali, quizá el mejor peso pesado de todos los tiempos.

Ali, además de ser un gran atleta, sabía cómo vender sus peleas. A los 19 años, decidió que quería aparecer en la revista Life, la de mayor circulación de la época.

Sin embargo, los editores de Life contestaron que la historia de un simple boxeador no era muy interesante.

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La respuesta de Ali fue que no era un “boxeador ordinario”. Le dijo a los editores que entrenaba bajo el agua, lo cual despertó su curiosidad y resultó en el siguiente artículo:

Años después, Ali confesó que todo había sido un truco diseñado para atraer la atención de Life. Aun así, estas imágenes se han convertido en unas de las más icónicas en la historia deportiva.

En todos los deportes, pero particularmente en el box, ser talentoso no es suficiente. Necesitas vender una historia y Ali era el mejor en esto. Un estimado de 1,000M de personas sintonizaron su pelea contra George Foreman (cerca del 25% de la población mundial del momento).

Pero en cuanto Ali y sus contemporáneos se retiraron del deporte, la popularidad del box decayó.

Floyd Mayweather, probablemente el boxeador más popular de la actualidad, atrajo un total de 150M de espectadores a sus 20 peleas más populares. Como comparación, Ali atrajo a 9,600M de fans en 19 peleas.

¿Cuál es la razón de este declive?

Los boxeadores no pueden competir cada fin de semana. Usualmente necesitan meses de recuperación después de una pelea. Un boxeador pelea unas 2 veces al año, mientras que un futbolista juega unos 40 partidos en el mismo periodo.

Para compensar, los promotores del boxeo tienen que volver cada pelea un evento grandioso y aparatoso. La mayoría de las peleas empezaron a recibir promoción semanas antes del evento y se empezaron a transmitir en formato Pay Per View.

Detrás de un portal de pago, los boxeadores empezaron a desaparecer de la cultura popular. Eso, hasta que unos youtubers entraron a escena.

Joe Weller y Theo Baker fueron los pioneros en hacer una pelea entre influencers en 2017. Luego, KSI y Logan Paul llevaron el concepto al resto del mundo.

Al crear sus audiencias fuera del boxeo, los influencers pueden construir ejércitos enormes de seguidores que luego pagarán para verlos pelear.

Básicamente, están trasladando su audiencia al boxeo. La estrategia funcionó.

Los influencers NO son atletas

Sin duda, los influencers han revolucionado el box. Pero, ¿y el resto de los deportes?

¿Te gustaría ver un partido de tenis entre KSI y Logan Paul?

¿Qué tal una carrera de 110m con vallas?

¿O una competencia de patinaje artístico?

Esta estrategia, que ha sido tan poderosa en el box, simplemente no se traslada a otros deportes.

El box tiene la peculiar característica de que puede ser entretenido, aún si el nivel de los competidores es malo. Hay algo extrañamente atractivo de ver a dos personas presumidas y egocéntricas golpeándose entre si. No es necesario que tengan una técnica de golpeo ideal o un juego de pies inmejorable.

Elimina los golpes de la ecuación y se vuelve difícil de vender.

Lo que estos youtubers lograron con el box es increíble. Desafortunadamente (o debo decir, afortunadamente), no se traslada a otros deportes. Deportes como el futbol, basquetbol, tenis o natación se vuelven aburridos cuando los competidores no están en el más alto nivel.

Toma por ejemplo el partido de futbol de caridad que organizaron KSI y Logan Paul con algunos de los nombres más grandes del internet.

La audiencia para el juego fue de 2M de personas, y lograron recaudar €1M para la causa: un logro impresionante, sin duda.

Sin embargo, hay que considerar que los partidos de caridad se basan en lo novedoso. Una liga de estos jugadores jamás podría mantener esos niveles de audiencia a largo plazo.

Como comparación, la cifra de audiencia promedio para los juegos de la Premiere League en la temporada 19/20 fue de 1.9M de personas, según Sky Sports. Esta es una cifra impresionante si consideramos:

• que este número no toma en cuenta la considerable audiencia internacional,
• que excluye a las personas que miran en pubs y bares, o por streaming,
• que se refiere al juego promedio (y no necesariamente a un clásico como Manchester City vs. Liverpool),
• la gran cantidad de personas que no tienen una suscripción a Sky Sports, y
• que en el Reino Unido hay una gran cultura de ir a las casas de los amigos a ver partidos, cosa que Sky no puede monitorar de manera efectiva.

En pocas palabras, podemos decir que MrBeast no reemplazará a Mbappé o a Djokovic en un futuro cercano.

¿Por qué otros deportes no son tan afectados por los influencers?

Al tener mayor cantidad de eventos y no tener la barrera del Pay Per View, deportes como el futbol o el tenis cuentan ya con audiencias masivas. Los atletas que participan en estos deportes ya son super-famosos, aún sin redes sociales.

De hecho, a menudo son mejores generando una respuesta de los fans, incluso sin ser super extrovertidos.

Toma el ejemplo de Messi. Él ni siquiera habla inglés y no se caracteriza por su gran carisma y habilidades sociales, y sin embargo todos quieren verlo jugar. Nos vemos atraídos al aura de haber dominado una habilidad como nadie más en el mundo.

Entonces, cuando vemos a Logan Paul convirtiéndose en un boxeador popular, no quiere decir que los influencers se están volviendo más importantes que los atletas. De hecho, todo lo contrario.

Los influencers se están dando cuenta que los atletas son los influencers DEFINITIVOS.

En lugar de publicar bromas como hacía antes, Logan Paul está llenando su feed de publicaciones acerca de su camino y éxitos deportivos.

Y su decisión de unirse a la WWE es, sin duda, un movimiento calculado para hacer crecer su perfil como atleta profesional:

Soy muy consciente de lo poderosa que puede ser [la WWE] como plataforma para cualquier cosa que quiera hacer en la vida.

Logan Paul

Él y KSI han usado cualquier relación posible con el atleticismo para promocionar su bebida deportiva. Entienden que los atletas son increíblemente efectivos para vender productos porque exudan una sensación de éxito y superioridad.

Su empresa ya vende 10 millones de botellas al mes.

Hay una razón por la que Red Bull ha relacionado su marca con la F1, el fútbol, el hockey, la Nascar y todo tipo de deportes extremos.

¿Qué significa todo esto para ti?

Observa las 5 cuentas con más seguidores en Instagram.

Sin considerar la cuenta propia de Instagram, tenemos a dos atletas, una cantante/artista y una «socialite» (lo que sea que eso signifique).

La única de estas 4 personas que no se caracteriza por su excelente desempeño en algo es Kylie Jenner. Nació en la fama, su familia tiene un imperio internacional de contenido y atención, apareció en uno de los reality shows más populares de la historia de la televisión, se sometió a cirugías para cambiar casi todas las partes de su cuerpo y verse más atractiva en Instagram y aun así está lejos de los seguidores de Ronaldo. Él, por su parte, nació en la pobreza, sin fama y sin nada. Simplemente extrema dedicación y talento.

Messi también está por encima de ella con 1/7 de sus publicaciones.

El desempeño de clase mundial llama la atención como ninguna otra cosa.

El tipo de éxito de gente como Rafa Nadal o Erling Haaland es difícil de fabricar. Y a la gente le gusta.

Convertirse en el mejor del mundo, dominar tu área, aplastar a la competencia, superar la adversidad… no hay nada que pueda reemplazarlo.

Y no tienes que ser un deportista para que funcione. Es cierto que Instagram, como plataforma, se presta para que brillen este tipo de personas. Pero si observamos a las personas con más seguidores de Twitter encontrarás a los políticos, empresarios y artistas más influyentes, además de los deportistas.

Entonces, ¿qué estás haciendo para promocionar tu empresa?

¿Estás tratando de publicar contenido y convertirte en un “influencer”? ¿O estás trabajando duro para dominar tu área y convertirte en el mejor del mundo?

Solo una de estas llama la atención de la gente.

Solo una de estas te hará influyente, admirado y rico.

Como dice Cal Newport: «Se tan bueno que no puedan ignorarte.»

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Espero que hayas disfrutado esta información y sobre todo, que te sea útil en tu empresa. Espero verte en el próximo.